Hablar de Juan Antonio Massone es hablar de carácter, de espíritu, momentos de evocación tan profundos, como cada uno de los escritos que el poeta tiene como arma de seducción y difusión de pensamientos que no pasan de moda y que sitúan a sus seguidores, como un referente de la literatura nacional.
Sus pensamientos sobre la cultura actual, sus inspiraciones, el periodismo y la literatura como base de la escritura, de cualquier artista, de lápiz y papel, es lo que a continuación nos da a conocer en una entrevista exclusiva con Kulturízate.
¿Cómo nace la pasión por la literatura?
El nacimiento de una pasión se reconoce de acuerdo al temperamento y aurora del espíritu personal, quizás a partir del momento en que alguien anhela un saber más hondo de sí, de los demás, de lo humano, y experimenta la insuficiencia de los hechos escuetos para recibir algunas respuestas con mar de fondo. La pasión lo es de decir a otros, sobre la base de alguien, mucho o poco de cuanto incumbe a nuestra especie, pero a partir de lo singular.
¿En qué momento de su vida, se da cuenta de que lo suyo son las letras?
Era una adolescente de 13 años. Un día, mientras caminaba por una calle de Ñuñoa, dije a un primo mayor que yo: "Sé que tengo algo que decir y, cuando sea adulto, podré expresarme adecuadamente". Experimentaba la insuficiencia del idioma que yo poseía, junto a la sensación de agobio con que arrastraba mi adolescencia.
¿Qué tiene el periodismo de literatura y que tiene la literatura de periodismo?
Literatura y Periodismo tienen en la palabra, materia y forma de lo vivo. Para la primera el mundo se sitúa en el podría haber sido, o tal vez, en el podría ser o estar siendo; el segundo, se ajusta mucho más a lo categórico de los hechos y, eventualmente, de los acontecimientos. Desde luego, lo dicho exige un amplia gama de matices. De cualquier manera, la palabra es sueño, vigilia, lontananza, aquí mismo, silencio de lo fable y de lo inefable.
¿Qué le inspira escribir?
Aquello que despierta en mí caracteres de urgente necesidad expansiva y comunicable.
¿Es un don ser escritor?
Lo es no más ni menos que otros dones. Un don es gracia recibida, gratuidad pura, sin méritos de quien recibe; encargarse de su desarrollo de modo responsable y atender a las posibilidades de una forma habitada es obra de la virtud, esto es, del trabajo personal que implica compromiso permanente. En el caso del escritor, el conocimiento y experiencia del propio idioma y de una formación incesante.
¿Qué aporte hace la literatura a la cultura?
La literatura aporta memoria, imaginación, intensidad lúcida y pasión de lo inexplicable en tanto se esfuerza en mostrar lo silente, lo oculto, la otra versión humana de lo posible y de lo imposible.
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