Con La Bayadera, una impactante producción de Luis Ortigoza como coreógrafo y de Pablo Núñez como escenógrafo y diseñador del vestuario, se dará inicio a la temporada del Ballet de Santiago, que en 2009 celebra sus 50 años. Para estas celebraciones, la directora Marcia Haydée, programó títulos de coreógrafos ligados a la compañía y se prevé el estreno mundial de “EL Zorro”, de Eduardo Yedro con música de José Luis Domínguez.
Las funciones de La Bayadera, en las que se podrá apreciar todo el lujo oriental de esta producción que narra una historia de amor, pasión y muerte, se realizará en el Teatro Municipal de Santiago a partir del martes 28 de abril. Esta obra fue estrenada en 2007 y Ortigoza y Núñez trabajaron en conjunto en su creación, cuidando hasta del más mínimo detalle, para estampar en esta puesta en escena todo el lujo oriental.
El primer bailarín estrella y ahora coreógrafo, Luis Ortigoza, comenta que “la idea con Pablo (Núñez) fue recrear los lugares y situaciones donde transcurre la historia, ambientando cada lugar, dentro de lo que la estética del ballet permite”.
El primer bailarín estrella y ahora coreógrafo, Luis Ortigoza, comenta que “la idea con Pablo (Núñez) fue recrear los lugares y situaciones donde transcurre la historia, ambientando cada lugar, dentro de lo que la estética del ballet permite”.
El clásico Reino de las Sombras
En esta obra, el cuerpo de baile juega un rol fundamental. Famosa es la escena, clásica por excelencia, del Reino de Las Sombras, donde se lucen las bailarinas en un momento mágico y especialmente difícil de lograr. Pero Ortigoza también pone énfasis en el rol de los varones. “Ellos tienen una mayor participación. Hay danzas especiales para los guerreros y los sacerdotes. Sin pretender quitarle protagonismo a las mujeres en el Reino de las Sombras, quiero equiparar los roles femeninos y masculinos del cuerpo de baile”.
Destaca Ortigoza lo especial que ha sido este título en su vida. Recuerda que la primera vez que vio la obra fue cuando era niño, con la Makarova y el ABT. Después bailó esa y otras versiones, “y el tema me atrae mucho, las costumbres y rituales de la India. Las entiendo y he investigado mucho y ahí te das cuenta porqué los personajes son como Petipá los presentó originalmente”.
La música de Ludwig Minkus será interpretada por la Orquesta Filarmónica de Santiago, bajo la batuta de José Luis Domínguez. La iluminación, en tanto es de José Luis Fiorruccio.
En esta obra, el cuerpo de baile juega un rol fundamental. Famosa es la escena, clásica por excelencia, del Reino de Las Sombras, donde se lucen las bailarinas en un momento mágico y especialmente difícil de lograr. Pero Ortigoza también pone énfasis en el rol de los varones. “Ellos tienen una mayor participación. Hay danzas especiales para los guerreros y los sacerdotes. Sin pretender quitarle protagonismo a las mujeres en el Reino de las Sombras, quiero equiparar los roles femeninos y masculinos del cuerpo de baile”.
Destaca Ortigoza lo especial que ha sido este título en su vida. Recuerda que la primera vez que vio la obra fue cuando era niño, con la Makarova y el ABT. Después bailó esa y otras versiones, “y el tema me atrae mucho, las costumbres y rituales de la India. Las entiendo y he investigado mucho y ahí te das cuenta porqué los personajes son como Petipá los presentó originalmente”.
La música de Ludwig Minkus será interpretada por la Orquesta Filarmónica de Santiago, bajo la batuta de José Luis Domínguez. La iluminación, en tanto es de José Luis Fiorruccio.
Bayadera
En la antigua India se les daba el nombre de bayadera a las bailarinas que amenizaban con sus cantos y sus bailes las ceremonias religiosas y también las fiestas profanas.
La obra narra los trágicos amores de Nikiya, una bayadera, y Solor, el más valiente de los guerreros. Nikiya debe enfrentar a Gamzatti, hija del Rajá, a la que su padre ha entregado como esposa a Solor; Nikiya recibe la orden de bailar en las bodas de su rival con el hombre que ella ama. La bayadera baila, y lo hace portando un cesto con flores, en el que se oculta —por orden de Gamzatti— una serpiente venenosa que provoca la muerte de la bailarina.
Solor se entrega a la evasión del opio, y tiene una visión del mundo espectral de las bayaderas que han fallecido. En el Reino de las sombras, el guerrero se encuentra con el espectro de su amada, pero el sueño se disipa y Solor debe tomar como esposa a la hija del Rajá.
En el instante en que los esposos intercambian anillos, se desata la cólera de los dioses, los que provocan la destrucción del templo y la muerte de todos los presentes.
Finalmente, Solor y Nikiya se unen en el Reino de las Sombras.
En la antigua India se les daba el nombre de bayadera a las bailarinas que amenizaban con sus cantos y sus bailes las ceremonias religiosas y también las fiestas profanas.
La obra narra los trágicos amores de Nikiya, una bayadera, y Solor, el más valiente de los guerreros. Nikiya debe enfrentar a Gamzatti, hija del Rajá, a la que su padre ha entregado como esposa a Solor; Nikiya recibe la orden de bailar en las bodas de su rival con el hombre que ella ama. La bayadera baila, y lo hace portando un cesto con flores, en el que se oculta —por orden de Gamzatti— una serpiente venenosa que provoca la muerte de la bailarina.
Solor se entrega a la evasión del opio, y tiene una visión del mundo espectral de las bayaderas que han fallecido. En el Reino de las sombras, el guerrero se encuentra con el espectro de su amada, pero el sueño se disipa y Solor debe tomar como esposa a la hija del Rajá.
En el instante en que los esposos intercambian anillos, se desata la cólera de los dioses, los que provocan la destrucción del templo y la muerte de todos los presentes.
Finalmente, Solor y Nikiya se unen en el Reino de las Sombras.
Detalles de la producción
Para la confección del vestuario y la escenografía, tanto Pablo Núñez como Luis Ortigoza, se preocuparon personalmente de comprar cada tela y adorno que se ocupó en la producción. La piedrería y pasamanería la adquirieron en Chile y en viajes que los artistas realizaron a Buenos Aires, Miami, Nueva York y Barcelona.
Se ocuparon 700 metros de pasamanería, 15 mil piedras y 500 metros de tiras con perlas.
Sin duda, un título imperdible para comenzar las celebraciones de los 50 años del Ballet de Santiago, que dirige Marcia Haydée.
Para la confección del vestuario y la escenografía, tanto Pablo Núñez como Luis Ortigoza, se preocuparon personalmente de comprar cada tela y adorno que se ocupó en la producción. La piedrería y pasamanería la adquirieron en Chile y en viajes que los artistas realizaron a Buenos Aires, Miami, Nueva York y Barcelona.
Se ocuparon 700 metros de pasamanería, 15 mil piedras y 500 metros de tiras con perlas.
Sin duda, un título imperdible para comenzar las celebraciones de los 50 años del Ballet de Santiago, que dirige Marcia Haydée.
Funciones:
Martes, 28 de abril de 2009 / 19:00
Miércoles, 29 de abril de 2009 / 19:00
Jueves, 30 de abril de 2009 / 19:00
Sábado, 02 de mayo de 2009 / 19:00
Precios desde $ 2.000
Teatro Municipal de Santiago.
Departamento de Ventas.
Agustinas 794 – Teléfono: 2-463 8888
Parque Arauco Boulevard Local 352-A – Teléfono: 2-432 9696
FONOVENTAS 800 47 1000 – www.municipal.cl
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